El restaurante, llegamos a las 9:30 y ya de entrada lo primero que me dicen que la cocina se cierra a las 9:50, ni buenas noches ni nada, le digo que estoy en el hotel y que les daré la nota rápido, que les daba igual, me senté y a los dos minutos ya tenia al camarero presionándome, en resumen tomé la decisión y se la comuniqué, esta tardo más de 20 minutos, con la carne totalmente fria. No es lo peor es que llegaron dos parejas más y no solo es que les atendieron, ya eras 9:50, si no que además se entregaron en amabilidad hacia ellos. Muy lamentable para un hotel tan chulo y impresionante, deberían revisar el servicio de cena. Por cierto nada barato, en este caso calidad-precio fatal.

Todo en general, es un hotel fantástico, bien situado personal amable, desayuno excelente, servicios completos y rápidos. La habitación muy amplia y las de vistas al interior con al excepcional Acuario una pasada, relajantes.

Se alojó en diciembre de 2022

Desayuno muy mejorable

Ubicación, comodidad, tranquilidad

Se alojó en diciembre de 2022

el personal es muy atento

Se alojó en diciembre de 2022

ubicación

Se alojó en diciembre de 2022

nada

todo

Se alojó en noviembre de 2022

La habitación era muy pequeña, pero funcional. Lo peor el baño. No tenía ducha. Solo bañera. La presión del agua fría no existía así que tenías que elegir entre ducharte con agua ardiendo o estar 30 minutos bajo el agua para mojarte. Los enchufes de mesilla no funcionaban. La wifi bastate lenta. En general la habitación sería la de un 4 estrellas en España mediocre

El hotel está en un sitio buenísimo. Al lado de la catedral. Es un hotel bonito. el checkin y checkout está muy bien porque te dejan hacerlo online y es muy rápido. La cama aunque sonaba estaba bien.

Se alojó en octubre de 2022

habitación un poco oscura

la ubicación y el desayuno

Se alojó en octubre de 2022

Hotel con una ubicación maravillosa para visitar Berlín. Las habitaciones muy cómodas y nuevas. Me encantaría volver

Se alojó en octubre de 2022

Todo me gustó

Se alojó en septiembre de 2022

nada que decir

exelente ubicacion , personal muy amable siempre atentos a lo que pudieses necesitar, cerca de puntos de interes como los museos . nuestra habitacion con vista a un acuario maravilloso en el centro del hotel. metro a una cuadra, sector seguro , el desayuno excelente y bien atendido .

Se alojó en agosto de 2022

Super cómodo, el desayuno variado y sabroso. El personal atendía muy bien

Se alojó en agosto de 2022

que el desayuno no estuviera incluido en el precio que se oyera la música del foyer/bar por la noche (no aporta nada para quién está en el bar y puede molestar a quién desea dormir) que se oyera un ruido de ventilación 24 horas.

la localización el personal la cama las sábanas la decoración de la habitación la opción de alquilar bicis en el hotel que tenga spa que tenga gimnasio

Se alojó en septiembre de 2022

todo

Se alojó en agosto de 2022

Cuando llegamos insistieron demasiado en que pagásemos una mejora de las 2 habitaciones por 100€ día a mayores de lo pactado, al negarnos siguieron insistiendo ofreciéndonoslas por 50 € , ante la negativa, nos dieron una habitación en el primer piso hacia el acuario bastante ruidosa ya que el bar no cerraba hasta la 1 de la madrugada, oscura y solo se veía la base del acuario .

El desayuno impresionante tanto el bufet como la carta

Se alojó en agosto de 2022

El horario de la piscina.

El Acuario, ubicación, piscina, decoración

Se alojó en agosto de 2022

El personal q atiende en el desayuno es poco servicial y antipático. La mayoría no entiende inglés, cosa q me parece inadmisible para alguien que trabaja en un hotel.

El desayuno es espectacular! Muy variado, bien servido y riquisimo! En cuanto a la ubicación, diría q no es la zona mas linda , pero si vas a Berlín por primera vez, es perfecta porque los principales puntos de visita, se pueden hacer caminando.

Se alojó en agosto de 2022

Ubicación Perfecta. Hotel precioso

Se alojó en julio de 2022

Este hotel tiene fallos que no son admisibles en un hotel de su categoría: Por problemas con el avión llegamos a las 10:30. Pedí algo para comer principalmente para el niño y nos dijeron que la cocina estaba cerrada y que no había servicio de habitaciones porque no encontraban personal después del COVID. Como solución nos dieron una página para pedir comida a domicilio y que la mandáramos al hotel indicando el número de habitación. He estado en hostales en España que se desviven por hacerte un par de huevos fritos para que no te vayas a la cama con el estómago vacío. La limpieza, aunque correcto, no era exagerada. Una de las almohadas tenía marcas, no se si producidas por nosotros o anteriores, incapaces de que nos las cambiaran. La habitación tampoco es excesivamente grande, para un hotel de su categoría se espera más. Y una cosa más, en el hotel hace frío, pero frío de verdad, Hemos ido en agosto en plena ola de calor y supuestamente con restricciones para ahorrar energía. Pues teníamos que dormir con el edredón con el aire acondicionado apagado. El aire acondicionado general tenía los pasillos helados de frío.

La ubicación del hotel es ideal para visitar la isla de los museos, está al lado. La puerta de Brandenburgo está a un kilómetro andando y la torre de comunicaciones muy cerca. Desde el aeropuerto de llega muy bien con la línea S9 de la SBan. Parad en Hackescher Markt, está mucho más cerca que Alexanderplaz que es lo que se suele indicar. El Spa entra con el alojamiento, algo a agradecer y que no es habitual. El personal muy bien, sobre todo un recepcionista brasileño, todo amabilidad y ganas de ayudar.

Se alojó en agosto de 2022

El personal de limpieza toca demasiado tus cosas personales. Por ejemplo: cambiaron la ropa de sitio (hasta el punto de volvernos locos buscando una prenda que sabíamos perfectamente dónde la habíamos dejado) y los cepillos de dientes nos los encontramos girados al contrario. Creo que es normal que toquen las cosas para poder limpiar bien pero no deberían cambiar las cosas de sitio. Eso si, estaba todo súper limpio.

Las increíbles vistas al acuario.

Se alojó en julio de 2022

Coincidimos con unos días que subieron muchísimo las temperaturas, poco habituales en Berlín y el aire acondicionado de la habitación, aunque estaba al máximo de frío, apenas se notaba, pero bueno, no era tampoco una sauna, al parecer, al no ser habitual para ellos como puede ser en España, no hay climatización muy adecuada, porqué hasta ahora no la han debido necesitar.

La atención del personal, la ubicación sobre todo, la ausencia de ruidos para el descanso gracias a su sistema de aislamiento supongo. La comida y sobre todo algunos platos en la carta de noche.

Se alojó en junio de 2022

precio parking

ubicación

Se alojó en julio de 2022

Precio del desayuno elevado, y no lo teníamos incluido.

La ubicación es excelente, era cómodo y estaba bien decorado. Está muy nuevo.

Se alojó en junio de 2022

nada

todo

Se alojó en julio de 2022

Nada la verdad..excelente hotel.

Todo esta muy bien. Sin fisuras.

Se alojó en julio de 2022